Tratar de hacer pis y no conseguir mear, ni echar gota.





La verdad que no le entiendo sr. Torres-Dulce. Si algo tengo más que claro tras mis 65 años de vida, es que los únicos que pueden cambiar las cosas en España, hacia una Democracia verdadera, suficiente y satisfactoria, si no queremos contar con alzamiento militar o una revolución ciudadana, y ya que la casta política ha demostrado por activa y por pasiva que disparase en un pie no forma parte de su hoja de ruta, son Uds., fiscales y jueces.

Cierto que de una forma u otra, en los altos tribunales y en su caso, les han puesto ahí los propios políticos. Pero no hace falta ser Martin Luther King para gritar que ¡Ayer tuve un sueño!

Y soñé que, a pesar de haber sido colocados ahí por los políticos, llegado el momento, habría suficiente gente justa entre Uds., los jueces de la Audiencia Nacional,Los jueces del Tribunal Supremo, los magistrados del Tribunal Constitucional –hoy no lo denominaré Prostitucional– y los altos cargos de la Fiscalía, todos ellos con dependencia jerárquica de Ud., no se olvide.

Y centrándome ahora en Ud., sr. Torres-Dulce, en por qué no le entiendo es debido a que habiéndole puesto en sus manos, las de la Fiscal ante el Tribunal Constitucional y, por tanto, en las suyas, la posibilidad de parar la locura secesionista, por la que podría haber planteado recurso contra la denegación de amparo contra la Resolución 5/X de la Generalidad Catalana, lo que hubiera eximido de responsabilidad al Gobierno de España, no lo ha hecho, permitiendo que crezca exponencialmente el órdago de la fiera hambrienta y secesionista que puede llegar a acabar con la España que conocemos.


Tenga por seguro, sr. Torres-Dulce, que si coloca sus expectativas de solución, en cualquier decisión que pueda tomar el sr. Rajoy, no es que esté desorientado, es que no sabe ni dónde está el Norte. Lo malo, confirmo sus sospechas, es que Rajoy contagia su apatía, su laissez faire, a todo el que se le aproxima.

Por eso no entiendo, o mejor dicho, me suenan a vacías sus palabras: “Monarquía y Estado, Nación y Constitución” constituyen el “fundamento de la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles” 

¿Cómo quién y cuándo va a impedir que los visionarios Mas y Junqueras lleven a término su Armagedón contra España? 

Como ya le he dicho Ud., con nuestra solicitud, ya tuvo su oportunidad de parar esa declaración soberanista y políticamente declinó hacerlo. Máxime cuando el propio Tribunal Constitucional, igual niega que afirma nuestro derecho, denegándonos nuestros derechos fundamentales,sin la legalmente exigida fundamentación, con un escueto

"... toda vez que los recurrentes carecen de legitimación conforme al art. 42 en relación con el 46.1 a) LOCT.". 


Mientras que en la contestación a la impugnación de la misma Declaración Soberanista, dice:

"La Resolución 5/X tiene claro efecto jurídico sobre el Gobierno autonómico en la medida en que le insta a la consecución de una cierta finalidad prescrita y controla que esa finalidad se cumpla. Y tiene igualmente efecto jurídico sobre la ciudadanía en cuanto pretende activar y promover el ejercicio de libre opinión [art. 20.1.a) CE] y participación en los asuntos públicos (art. 23.1 CE)"

Mire Ud., sr. Torres-Dulce, Mas y Junqueras hace bastante tiempo que deberían haber sido inhabilitados y puesto a disposición de la Justicia por conspiración para la sedición. Y Ud. lo sabe. No se lo dice un ultraderechista, se lo dice un español que se siente orgulloso de serlo, pese a la actuación de nuestro políticos y tristemente los miembros más relevantes de nuestro sistema judicial.

Lo hasta aquí –y en otros escritos redactados por mí y otros implicados– denunciado, podrá ser fruto del servilismo al político de turno de quienes tendría que mirar por intereses más altos y que, estos sí, no conciernen a todos los españoles. Podrán tener diversas tipicaficaciones legales, pero no dejan de ser consecuencia de la corrupción de un sistema pergeñados para que fuera corrompible. Por eso tampoco entiendo otra de sus frases:


"Junto a la corrupción pública”, se ha alzado también “la corrupción privada, cuyos sujetos activos son los directivos y administradores de sociedades que se prevalecen de su condición de lucrarse a costa de la entidad que gestionan y de las personas que tienen intereses en ella

Y no la entiendo porque a continuación, tendría que haberse pegado un tiro en el pie, sr. Torres-Dulce.




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